domingo, 21 de diciembre de 2014


Allí fuera la nieve por la ciudad
serpenteaba.
Por aquel lugar donde tantas veces
nos perdimos.
Por aquel lugar donde tantos momentos
y encuentros
vivimos.

Recuerdo cómo arrancábamos
la curiosidad de la
multitud.
Cómo llenábamos el mundo
de inquietud.

Aquí dentro todo estaba en calma
 y tus manos frías recorrían
mi espalda.
Tus ojos, por la habitación
se deslizaban.
Los míos, huían de tu presencia,
ignorando tu existencia.

Cuando nuestras miradas se encontraban,
nos desgarrábamos la piel.
Notaba tu sangre fría
y tus manos vacías.

Cuando nuestras miradas se encontraban,
sentíamos perder lo que llamábamos
nuestro y lo que algún día creamos
sin darnos cuenta.

Notaba cuchillos clavados en mi espalda
por cada palabra que articulabas.
Notaba fuertes golpes en mi pecho
en cada momento.
En pedazos todo rasgue
y en tan solo un segundo
lo destroce.

En pedazos lo rasgue y en tan solo
unos segundos
lo perderé.











No hay comentarios:

Publicar un comentario